Publicada el Jeudi, 21 de mars de 2024

Rechazada una moción para que el Parlamento anime a las familias a matricular a sus hijas e hijos en la educación pública

Contigo proponía comprometer al Pleno con la defensa y la mejora de la escuela pública, como garante de la equidad y la cohesión social, más aún en contextos de creciente diversidad

El Pleno del Parlamento ha rechazado hoy, con los votos en contra de UPN, PPN y Vox, las abstenciones de EH Bildu y Geroa Bai y los votos a favor de PSN y Contigo-Zurekin, una moción para instar al Gobierno de Navarra a “animar a las familias navarras a matricular a sus hijas e hijos en la red educativa pública durante el próximo proceso de preinscripción y matriculación para el curso escolar 2024-2025”.

 

EH Bildu ha presentado una enmienda de adición, no aceptada por Contigo-Zurekin, titular de la iniciativa, dirigida a demandar un “sistema educativo público de calidad, dotado de los recursos necesarios, que respete los derechos lingüísticos de todas las familias y garantice a los niños y niñas de toda Navarra la enseñanza del modelo D en condiciones de inmersión lingüística”.

 

Lo mismo ha sucedido con la enmienda de adición defendida por Geroa Bai, exhortando al Parlamento de Navarra a “animar a las familias en general, y a las migrantes en particular, a matricular a sus hijas e hijos en modelos en y con euskera”.

 

Tampoco ha sido aceptada la enmienda de sustitución registrada por UPN, con el fin de “exigir del Gobierno de Navarra una oferta educativa que garantice en lo posible el derecho constitucional a elegir la educación que las familias quieran para sus hijos e hijas”.

 

En la exposición de motivos, la moción impulsada por el G.P. Contigo-Zurekin daba cuenta del carácter mayoritario de la red pública, a la que este curso se ha incorporado el 63,7% del nuevo alumnado, y subrayaba el talante “innovador e integrador” de sus escuelas, dotadas con recursos humanos familiarizados con la “cultura del esfuerzo y la formación continua”, y modelos lingüísticos que “garantizan enseñanza de calidad en las dos leguas propias”.

 

En ese contexto, se atribuía al Parlamento de Navarra la misión de situar entre sus prioridades la “defensa y la mejora de la escuela pública”, en cuanto “garante de la equidad y la cohesión social”, más aún en “contextos de creciente diversidad religiosa y cultural”.

 

En relación con la libertad de elección de centro “reclamada por determinados sectores sociales”, se advertía que la concertación “no debería servir para seleccionar alumnado y, por tanto, segregar”, pues es algo que choca con la “obligación social de los poderes públicos”, cuyos esfuerzos deben ir dirigidos a “ofrecer la mejor educación posible en todos y cada uno de los centros públicos, favoreciendo la escolarización más cercana al domicilio familiar”.