El Parlamento de Navarra ha acogido hoy la celebración de una Jornada sobre “Partidos políticos y crisis institucional”, organizada conjuntamente con el Aula de Derecho Parlamentario de la Universidad de Navarra, con la presencia como ponentes de Manuel Aragón Reyes, Catedrático de Derecho Constitucional Universidad Autónoma de Madrid y Exmagistrado del Tribunal Constitucional y de Roberto Blanco Valdés, Catedrático de Derecho Constitucional Universidad de Santiago de Compostela.

En la apertura de la Jornada, a la que han asistido, entre otros invitados, alumnos de la Facultad de Derecho de la Universidad de Navarra, han intervenido el Presidente del Parlamento de Navarra, Alberto Catalán, y el Director del Aula de Derecho Parlamentario y exrector de la Universidad de Navarra, Ángel Gómez Montoro.

El Presidente del Parlamento de Navarra ha expuesto en su intervención sus reflexiones sobre el contenido sometido a debate en la jornada y sobre la necesidad de abordar reformas para mejorar el funcionamiento interno de los partidos y para afrontar la crisis de las instituciones.

Ha insistido en su idea ya expresada en otros foros de que la necesaria reforma de la ley electoral se presenta como un instrumento esencial para favorecer el acercamiento de los ciudadanos a sus representantes, a través de mecanismos de elección que superen las carencias del actual sistema electoral.

El Presidente del Parlamento de Navarra ha concluido apelando a la lealtad institucional y a la importancia de la labor que corresponde a los partidos políticos en este momento de crisis institucional en el tratamiento de los asuntos que afectan al modelo territorial. En este sentido ha rechazado los ataques que sufre el régimen foral y un instrumento clave del autogobierno de la Comunidad Foral como es el Convenio Económico, que ha demostrado ser un claro ejemplo de solidaridad y de lealtad con el resto de España.

“Los partidos políticos –ha concluido- tienen mucho que decir y que hacer, pero siempre teniendo presente sus dirigentes que deben ser estructuras participativas, transparentes, abiertas y, con una relación fluida y directa con el ciudadano y, con ellos, los representantes elegidos democráticamente. En caso contrario, con dificultades, económicas o sin ellas, la desafección y la crisis de las instituciones perdurará”.

Por su parte, el Director del Aula de Derecho Parlamentario ha destacado el interés del contenido de la jornada, centrado en el papel de los partidos políticos y la situación de crisis institucional que se percibe en el sentir de la ciudadanía abordado desde el ámbito de la reflexión teórica y del análisis académico.

Manuel Aragón Reyes ha analizado la relación entre el funcionamiento y organización de los partidos políticos y su influencia en la crisis institucional y otras causas que inciden en la imagen de deterioro que se está extendiendo en la sociedad.

Además, ha realizado un detenido análisis del deterioro que padecen instituciones como la Monarquía, el Parlamento y el poder judicial, así como determinados efectos del funconamiento del estado autónómico, lo cual habrá de precisar reformas constitucionales, intelectuales y conceptuales.

En el deterioro de la imagen de las instituciones ha destacado la importancia de los casos de corrupción o la deslegitimación del régimen representativo porque muchas decisiones importantes se adoptan en instancias que tienen que ver con la globalización y por instituciones europeas.

La democracia – ha señalado- no debe estar completamente identificada por los partidos. El poder político lo integran el Gobierno y el Parlamento y la politización del poder judicial es excesiva.
El Estado democrático –ha concluido- tiene que estar basado en el Estado de Derecho, en la elaboración de buenas leyes y evitar el recurso excesivo a los decretos leyes.

Roberto Blanco Valdés ha disertado sobre los partidos políticos y el funcionamiento del sistema institucional. Ha defendido el papel que el ordenamiento jurídico concede a los partidos políticos en un sistema democrático, pese a las deficiencias detectadas en el funcionamiento interno de las organizaciones políticas.

Ha repasado incidencias que se registran en el funcionamiento de los partidos en las instituciones, apuntando, por ejemplo, la idea de quien sostiene que si los partidos no se imponen votaciones uniformes en los parlamentos la democracia no funciona.

Por otra parte, ha señalado que los partidos son muy débiles en la sociedad, pero son muy fuertes en las instituciones. Ha defendido que el reglamento del Congreso se hizo en un momento en el que había que reforzar a los partidos; para a continuación apuntar que cuando se supere la crisis económica sería preciso afrontar las reformas. Ha criticado asimismo que los partidos controlan el ejecutivo, el Parlamento y el Consejo General del Poder Judicial, al que ha definido como un mini parlamento judicial.

El profesor Blanco ha sostenido que quien manda en el actual sistema poolítico es el Gobierno y el Presidente del Gobierno, que es quien manda en todo, incluso más que en Estados Unidos porque hay menos mecanismos de control.

Ha criticado que la política se haya convertido en una profesión para mucha gente, que ni siquira tiene una profesión, lo cual también ocurre en otros países.

Finalmente se ha mostrado excéptico en que las mejoras vayan a venir de la mano de una ley de partidos, o de una reforma electoral (al Senado se vota a los mismos candidatos que a las candidaturas del Congreso). Ha apostado, en cualquier caso, por mejoras que incidan en reforzar una relación razonable entre gobernabilidad y representatividad. El sistema lo ha garatizado razonablemente bien, ha concluido, y ha recomendado incidir en reformas en los casos en los que hay dificultades para formar gobierno, como en Italia.