Publicada el Freitag, 18 de März de 2016

Informe Anual del Defensor del Pueblo correspondiente a 2015

Enériz constata que, a expensas de ver el enfoque de los nuevos gestores, "la Administración sigue incapaz de responder a situaciones urgentes o excepcionales"

La Presidenta del Parlamento, Ainhoa Aznárez, ha recibido hoy en su despacho oficial a Francisco Javier Enériz, Defensor del Pueblo de la Comunidad Foral, quien le ha hecho entrega formal del Informe Anual correspondiente al ejercicio 2015, que contempla 2.791 actuaciones, 1.238 menos que en 2014, lo que supone un descenso del 31%.

La labor desplegada en 2015 ha permitido hacer llegar a las Administraciones Públicas de Navarra 104 sugerencias, 338 recomendaciones y 86 recordatorios de deberes legales (en total 560 decisiones). Todo ello fruto de los 7.933 ciudadanos que se han dirigido a la institución para, entre otros, realizar 1.193 consultas y presentar 1.546 quejas (han gestionado 972 expedientes), el 84,2% admitidas a trámite y el 81,9% fundadas. Se han practicado 652 investigaciones, 607 de ellas con motivo de las quejas recibidas, 31 de oficio, 11 a propuestas ciudadanas y 3 en razón de los informes elaborados.

Las diez materias en las que más quejas se han recibido han sido, por este orden, euskera, tráfico, acceso a un empleo público, bienestar social, función pública, educación, sanidad, medio ambiente, hacienda, urbanismo y vivienda.

Por lo que se refiere a la primera de las materias, euskera, se presentaron 610 quejas, entre las que destacan las 592 que solicitaban que los servicios de salud de Etxarri Aranatz “se presten también en esta lengua cooficial a quienes así lo deseen”.

En segundo lugar, se sitúan las 188 quejas referentes a tráfico. De ellas, 146 aluden a la escasez de examinadores del carné de conducir en la Jefatura Provincial de Tráfico de Navarra y a la excesiva tardanza en la realización de dichas pruebas.

La tercera posición la ocupan las quejas referidas al acceso a un empleo público, vinculadas principalmente a la gestión de las listas de aspirantes a la contratación temporal y al desacuerdo con la exigencia por el Departamento de Educación del nivel C1 de inglés como requisito de acceso a las oposiciones docentes para el cuerpo de maestros.

En cuarto término se sitúan las quejas de bienestar social, asuntos sociales o derechos sociales, en este caso la mayoría ligadas a la protección de la infancia y la adolescencia y las personas mayores de edad. También se han seguido presentando quejas sobre la renta de inclusión social (RIS), dado que “algunas Administraciones siguen obviando su carácter inembargable”, y sobre la protección de las personas con discapacidad.

En un quinto lugar se sitúan las quejas de función pública, referidas básicamente a la falta de reconocimiento y retribución de determinados complementos, y al desacuerdo con la integración en el Sistema Nacional de Salud de los funcionarios de los Montepíos de las Administraciones Públicas de Navarra.

La sexta materia en número de quejas es educación, con especial mención a las que atañen a la atención de alumnos con necesidades educativas especiales, al desacuerdo con las sanciones disciplinarias impuestas en materia de convivencia escolar, y la denegación de becas de estudios, transporte o residencia.

También destaca la disconformidad de un grupo de padres con la distribución de los grupos del segundo ciclo de educación infantil que se ha realizado en las nuevas instalaciones del colegio público de Sarriguren para el curso 2015-2016, porque, a su juicio, se entorpece la marcha normal y no se garantiza la seguridad física del alumnado. En esta queja se presentaron 4.142 firmas a través de la plataforma change.org.

En sanidad, sobresalen las quejas relacionadas con las listas de espera (sobre todo en traumatología) y la disconformidad con la atención clínica recibida.

En medio ambiente, predominan las quejas por ruidos generados por actividades de diversa índole y, en especial, las molestias en domicilios por contaminación acústica de bajeras de jóvenes y negocios de hostelería. Asimismo, se han presentado quejas relativas a los residuos y a la denegación de información ambiental o limitación de la participación ciudadana.

En noveno lugar, figura hacienda, materia en la que predominan las quejas referentes a los tributos de la Hacienda Foral de Navarra (fundamentalmente el Impuesto de la Renta de las Personas Físicas), así como las relativas al incremento de la contribución urbana tras la modificación de los valores catastrales.

La décima materia es urbanismo, donde se subrayan las quejas concernientes a la inactividad de los ayuntamientos en la adopción de medidas ante posibles incumplimientos denunciados por los ciudadanos, así como el desacuerdo de algunos propietarios con la aprobación de ciertas ordenaciones que les afectan.

En undécimo lugar se sitúa la materia de vivienda, cuyas quejas se centran en la denegación de ayudas públicas a la compra o arrendamiento de vivienda. Entre ellas, destaca la disconformidad de varios ciudadanos con la petición de reintegro de una subvención destinada a la compra de una VPO que no les había sido directamente abonada a ellos, sino a la promotora de la vivienda.

Tras el estudio de las quejas se han dictado 320 resoluciones, lo cual supone un descenso de 6 respecto a 2014. El grado de aceptación de las decisiones del Defensor alcanza el 62,3% (casi 8 puntos menos que en 2013), en la línea del ejercicio anterior, que fue el que mayor rechazos registró.

En cuanto a las consultas, han predominado las de bienestar social, en concreto sobre la protección de menores, la renta de inclusión social (RIS), y el ingreso y condiciones de estancia en centros y residencias para personas mayores. En salud, han versado sobre las listas de espera y el desacuerdo con la asistencia sanitaria dispensada. En hacienda, atañen a los tributos del Gobierno de Navarra y de las entidades locales. También, por este orden, se han registrado consultas en educación, urbanismo, garantías de derechos (derecho a una respuesta, acceso a la información, transparencia, etc.), justicia, medio ambiente y consumo.

Por otra parte, se han recibido 6 propuestas ciudadanas de mejora (son ya 287 desde que se puso en marcha esta iniciativa hace siete años), la mayoría referidas a actuaciones protegibles en materia de vivienda, y ayudas a la maternidad, la conciliación y la discapacidad.

Finalmente, del conjunto de la actividad desarrollada el año pasado a partir de quejas, consultas, actuaciones de oficio, propuestas de mejora e informes especiales se puede concluir, según precisa Javier Enériz, Defensor del Pueblo, que “las Administraciones son muy eficaces para recaudar y no abonar dinero a los ciudadanos y muy ineficaces para todo lo demás. Estamos ante una Administración muy estandarizada, incapaz de dar respuesta a situaciones personales, urgentes o excepcionales, cuyas pretensiones acostumbra a denegar amparándose en argumentos tan poco sólidos como trato desigual injustificado o riesgo de prevaricación”.

A ese respecto, Javier Enériz ha indicado que “ahora se está a la expectativa de comprobar cómo responden las Administraciones con sus nuevos responsables, veremos si cambia o no el enfoque de los problemas principales. El menor número de quejas en 2015 se debe a su condición de año electoral, que conduce a un cierto parón en las Administraciones”.

Por otra parte, Enériz constata que, “por número de quejas, euskera, tráfico y acceso a empleo público continúan centrando las reclamaciones de la ciudadanía. Por número de expedientes y consultas, empleo público y bienestar social siguen acaparando el interés. En todo esto no hay mayores novedades”.

El Defensor del Pueblo de la Comunidad Foral de Navarra es la Institución que, por mandato del Parlamento, vela por el respeto y mejora de los derechos y libertades públicos de los ciudadanos, y con esta finalidad supervisa la actuación de todas las Administraciones Públicas de Navarra.