Publicada el Mardi, 17 de mars de 2015

La exparlamentaria María Victoria Arraiza Zorzano recibe a título póstumo la Cruz de Carlos III el Noble

El galardón reconoce la contribución de entidades y personalidades al progreso y prestigio de la Comunidad Foral

El Presidente del Parlamento, Alberto Catalán, ha asistido este martes al acto de imposición de la Cruz de Carlos III el Noble, que reconoce la contribución de entidades y personalidades al progreso y prestigio de la Comunidad Foral, a los joteros Jesús y Raúl Anoz, el sacerdote José Antonio Arzoz, los periodistas Matías Escribano y Gabriel Imbuluzquta, el librero Javier López de Munáin y la exparlamentaria María Victoria Arraiza, a título póstumo.

La imposición ha tenido lugar en una ceremonia celebrada en el Salón del Trono del Palacio de Navarra y que ha contado con la presencia de las principales autoridades de la Comunidad Foral.

Respecto de la exparlamentaria socialista María Victoria Arraiza Zorzano, fallecida el pasado mes de enero, el Ejecutivo subraya su “compromiso social, político, solidario y cultural”. Destaca que ha sido “un ejemplo de humanidad y compromiso personal” con las causas de los que más sufren y necesitan, y que ha potenciado “singularmente” el patrimonio histórico y cultural del Camino de Santiago. La distinción ha sido recogida por miembros de su familia.

La condecoración fue creada por el Ejecutivo foral en 1997 con el fin de resaltar y reconocer públicamente los méritos de personas y entidades que han contribuido de forma destacada al progreso de Navarra o a su proyección exterior.

Según recoge el decreto de su creación, las cruces adoptaron el nombre de Carlos III el Noble, debido a que fue un monarca que “destacó entre el conjunto de los reyes de Navarra por su talante pacífico y conciliador, por sus iniciativas a favor de la cultura y del arte, y por el establecimiento de relaciones de paz y amistad con las demás cortes europeas”.

El galardón consiste en una cruz de Malta, cuyos cuatro brazos están esmaltados en rojo, contorneados en oro y con una flor de lis del mismo metal en cada uno de ellos. En el centro reproduce, en esmalte, la efigie mayestática de Carlos III el Noble que figura en varios de sus sellos céreos que se conservan en el Archivo Real y General de Navarra, orlado con las cadenas de Navarra en oro.

En el reverso figura el escudo oficial de Navarra sobre la expresión “Comunidad Foral de Navarra” y la leyenda de “Cruz de Carlos III el Noble de Navarra”.